martes, 17 de diciembre de 2013
domingo, 9 de junio de 2013
Salvemos nuestros hijos/hijas. A la Violencia, un ¡Pare!
La Violencia
carcome nuestro derecho de ser libres, nos roba la esencia, nos impide ser uno
mismo. Es una plaga social que de no "exterminarla"
oportunamente se propaga y afecta nuestros hijos e hijas y así continúa su transmisión de generación en generación...
Esto así porque los
niños y niñas que crecen en ambientes violentos y viven la angustia de la madre
maltratada (su temor, inseguridad, ansiedad y tristeza), crecen siendo inseguros,
agresivos, temerosos, tristes...Insanos mentales. Llegan muchas veces a sentir
equivocadamente que son los culpables de provocar los actos violentos de los
que son testigos, tal y como sucede con la madre. Y es que eso aprenden, crecen
con el discurso del maltratador que los culpa y responsabiliza de sus
reacciones violentas.
Paradójicamente,
muchas veces las mujeres se quedan en la relación porque siguen pensando que lo
mejor que pueden dar a sus hijos es una familia, sin embargo, una familia en la
que el "modus operandi" está basado en violencia, es una familia
disfuncional en la que madre, hijos e hijas están sufriendo malos tratos con
todas sus consecuencias.
Separar los
niños/niñas de un ambiente de malos tratos no es privarlos de una familia, más
allá, es darles la oportunidad de desarrollarse física y emocionalmente de
manera sana. Es proveerles seguridad porque en los hogares que predomina la
violencia física o psicológica, el temor de actuar, hablar y sentir es una
constante para todos los miembros de la familia, sin distinción alguna. Solo se
escucha la voz del que más alto grita y, contradecir a este, se convierte en la
peor pesadilla porque es él quien siempre tiene la razón, los que están a su
alrededor no piensan, no saben y no sirven para nada…
Estos niños y
niñas, conforman su personalidad en función de la violencia y la toman como
modelo para relacionarse con sus parejas cuando se convierten en adultos; y es
que corren el riesgo de repetir los mismos patrones que aprendieron, ellos se
convierten en multiplicadores de ambientes violentos, son agresores, perversos,
controladores, manipuladores; y ellas, muchas veces, eligen un
"verdugo", muy parecido al que tuvieron en casa...Esto es, cada uno interioriza
los roles de maltratador y maltratada, como una forma "normal" de
relacionarse porque obtuvieron el patrón de conducta de las personas que fungen
como modelo y ejemplo en su proceso de formación, porque la violencia se
aprende, no hay un gen que la transmite -no se hereda! Ser violento es una decisión que responde a
un mal aprendizaje.
Entonces, ¿hace sentido afectar los hijos o hijas por no
"privarlos" de una familia?
Tenemos la libertad
de elegir lo que queremos para nosotras mismas y para nuestros hijos, tenemos
la libertad de decidir el vivir sin violencia, tenemos la responsabilidad de
salvar los niños y niñas de la violencia…Luchemos sin descansar para evitar que
el flagelo de la violencia siga desarrollándose.
sábado, 4 de mayo de 2013
Sandra:
Tu historia ya no es tu historia....
Mujer elegante, bella,
profesional, de la alta sociedad, hija de cualquier país....hoy te
condenan porque sacaste los "trapos sucios" al sol...
Nadie vio nunca tu
tristeza, tus ojeras, tu "dejar pasar" "por el bien de la familia" "por la
imagen ante los demás" y sobre todo por tu esperanza de que el milagro del
cambio llegaría....
Hoy estoy contigo, hoy
te acompaño en tu dolor, si te acompaño en tu dolor como cuando damos un pésame,
¿Sabes por qué? porque hoy murió aquella esperanza....La esperanza que te tenia
alejada de todo y de todos, con ese callado deseo de que por fin tu príncipe
fuera azul, el príncipe que había llegado a rescatarte, no el verdugo que el
miedo te había mostrado, un monstruo vestido de gala, que era príncipe para el
mundo y para ti era gris, negro, dolor, silencio....
Y me da tanta pena y
dolor, saber que muy pocas te entenderán, muchas dirán incluso que algo hiciste
para provocar esta situación...y no saben que para llegar a la violencia física
hace mucho que la otra, la que no se ve, la que todos justifican...hace tanto
tiempo se había instaurado...Ya las descalificaciones, las humillaciones, el
ignorar tus necesidades eran parte del día a día, de tu historia. Decirte mala
madre, inculta, bruta, insípida, eran parte de lo cotidiano...quizás decirte que
en tus años mozos pudiste caer bajo, te entregaste a cualquier o aceptaste lo
indebido para lograr tus objetivos...Y tú sabes que no es así, y esperas el
cambio, y sueñas con el príncipe azul que ves en las revistas de
sociedad...
Si, te humillaron, te
hicieron creer que eras culpable, que merecías esto que estabas viviendo....pero
cuando comenzaste a ver la realidad, a descubrir que hay otro mundo sin miedo,
con la libertad de ser tú, te diste cuenta que había que hablar, que tu historia
podía salvar a muchas...Ya no era asunto tuyo, eras parte de la historia de
tantas muertas....
Y DESPERTASTE Y TE DISTE CUENTA DE QUE LA
PRINCESA ERAS TU Y QUE EL HOMBRE QUE TE VALORARA Y RESPETARA ERA EL VERDADERO
PRINCIPE...LO IMPORTANTE ERA QUE ENTENDIERAS ESO: YO SOY VALIOSA, QUIEN NO ME
VALORA NI ME RESPETA NO ME MERECE.
CONTAMOS CONTIGO PARA SEGUIR CONTANDO
HISTORIAS DE VIVAS...
domingo, 10 de marzo de 2013
HOY ESTOY DONDE DECIDI ESTAR
HOY
ESTOY DONDE DECIDI ESTAR
Y es que entre las leyes misteriosas de la vida,
está el que siempre nos percatamos tardíamente de sus valores verdaderos y
esenciales: de la juventud cuando desaparece; de la salud, cuando nos
abandona; y de la libertad, la esencia
más preciosa de nuestra alma, sólo en el momento en que nos la pueden
arrebatar o cuando ya nos la han arrebatado. STEFAN ZWEIG.
|
Y respirando el aire matutino, caminando el
camino que decidí elegir andar…
He pensado y reflexionado que:
Cada paso, cada alegría y cada dolor ha
sido consecuencia de mis decisiones.
Aunque la ingratitud sea la paga dice un
escrito que recuerdo haber leído…
Aunque tu historia sea la lealtad castigada…
Aunque los frutos no hayan sido los esperados…
Hoy estoy donde decidí estar….porque yo
hago mi camino…
No puedo culpar a otros porque pude decir
basta! Si no lo hice quizás por miedos,
temores, anhelos, dudas, sueños, no puedo culpar a otros porque hoy estoy donde
decidí estar.
Si me
equivoqué en las decisiones o en el momento que las tomé, tengo que
asumir que hoy estoy donde decidí estar.
Y sólo así daré el paso al segundo nivel,
sólo así encontraré las respuestas, sólo así viviré la vida que merezco…
Hoy estoy donde decidí estar…
Y encontré un nuevo amor: El amor a mí
misma…
Hoy estoy donde decidí estar…
Y
salí en busca de mis sueños…
Hoy estoy donde decidí estar…
Y
estoy viviendo ese sueño: Mi yo, la libertad, mi ser, mi esencia…
Y viviendo mi
sueño me comprometo a llevar este mensaje a cada ser humano que encuentre en mi
camino, ya sea, mujer, hombre, niña, niño, joven, viejo, rico, pobre, blanco,
negro, oriental, occidental.
Sólo así sé que realmente: ESTOY DONDE
DECIDI ESTAR!
SONSOLES
DE LUNA
Suscribirse a:
Entradas (Atom)